La Real Federación Española de Caza, tras los incidentes acontecidos durante la disputa del último campeonato de España de caza menor con perro, ha decidido reformar los reglamentos que rigen la competición en un claro intento de evitar en lo sucesivo estos problemas.

En un comunicado hecho público, el máximo organismo nacional indica que «tras los penosos incidentes que enturbiaron el pasado Campeonato Nacional de Caza Menor con Perro y las repercusiones que todo ello está teniendo para la imagen de la Caza» y tras reiterar «su más absoluto rechazo a las prácticas antideportivas y tramposas que no sólo adulteran la competición en si, sino que empañan y desprestigian la imagen del conjunto de los cazadores, ha considerado de urgencia reformar este campeonato y su reglamento para erradicar los problemas planteados».

Entre las decisiones que adopta la federación se cita «la posible suspensión del campeonato de caza menor con perro en tanto en cuanto no se modifique el reglamento de forma satisfactoria y se garantice la limpieza absoluta de la prueba», para así poder «modificar el reglamento de caza menor con perro y mejorar la organización de esos campeonatos además de incrementar las medidas de control».